BIOÉTICA EXISTENCIAL

Autora: Concetta F. Sinopoli

ÍNDICE

  1. Para una definición de Bioética Existencial
  2. Bioética Existencial :  para un Manifiesto
  3. Bibliografía y notas
  • Para una definición de Bioética Existencial

 

            En nuestra época, la libertad proclamada y los derechos internacionales, aunque establecidos y firmados, de hecho, no están asegurados a todos los pueblos. Muchos son los problemas humanos que nos suscitan la reflexión hoy: pero ética y bioética no entran en nuestra cotidianidad, no se convierten en parte de las opciones personales y colectivas. Grupos sociales, políticos o ideológicos no reconocen los principios filosóficos o jurídicos, generalmente aceptados hasta hace poco tiempo.

            Adquisiciones democráticas, bases constitucionales de los estados, proporciones y objetivos de las normas éticas compartidas por los ciudadanos y garantía de las empresas, son ignorados en muchas regiones del mundo en que el hombre está lejos de la posibilidad real de su plena realización conforme con  principios, modelos, características específicas, condiciones antropológicas y ontológicas.

            Desde los años setenta del siglo pasado  la Bioética ha encontrado espacio y seguidores en contextos académicos y estratégicos, diferenciándose en disciplinas sociales y médicas. A la Bioética general sigue la especial para apoyar criterios decisionales en la sala de operaciones o en la cama del paciente, pero se puede ver que, siendo la Bioéticaconfluencia e interrelación de diferentes disciplinas”, no implica todavía la reflexión y la participación de los individuos y las comunidades, y no se beneficia como itinerario ético-crítico: sus informaciones y sus nociones, relegadas a las aulas universitarias o conferencias locales, gubernamentales o científicas, no siempre están al alcance de la persona común, es más, no llegan.

            La desorientación ética de nuestra sociedad, las transformaciones y las tensiones ideológicas, evidencian, en el hoy y en el futuro, la urgencia de una ética de la vida y de la existencia que re-afirme, con claridad, en la confrontación y el debate cultural, los fundamentos antropológicos y filosóficos del camino humano. Es necesario re-descubrir, sobre el horizonte común, los supuestos y los valores fundamentales del ser humano, ‘persona’ en su realidad intrínseca, cuyo descubrimiento y definición derivan de los logros históricos y culturales y su interpretación no puede ser relegada al ámbito exclusivamente religioso.

            La  contribución de los valores religiosos puede ser considerada como un atributo para la formación de la conciencia humana, capaz de decisiones y elecciones. Cada dimensión religiosa auténtica solicita siempre al hombre al respeto de sí mismo y del otro, al diálogo y al encuentro, y puede impulsar, como a menudo sucede en algunas religiones,  a la búsqueda de autenticidad y  significado de la  vida y  del camino humano.

            Sin embargo, el requisito previo a un Bioética, que hemos definido existencial, es el re-descubrimiento del hombre y de su humanidad, porque todo aquello que concierne  al ser humano - y a cada hombre - surja de una mayor humanización sin compromisos, y cada elección se lleve a cabo de acuerdo con el criterio de "bien mayor" y no de "mal menor" en todo aquello que a él respecta, a partir de los aspectos esenciales de su experiencia personal, social y relación.

  • Bioética Existencial:  para un Manifiesto

            Nuestra reflexión bioética surge de la constatación de que los derechos y las libertades universalmente establecidos, mas no respetados por los gobiernos o la globalización, no influyen positivamente en la vida de muchas personas ya sea respecto a la dignidad de las mismas cuanto a las prerrogativas sociales. Por lo tanto, hemos pensado a la necesidad de inculturación de las cuestiones de bioética, a la indispensable confrontación, a la con división de las mismas y de soluciones más adecuadas a las exigencias constitutivas para el ser humano en todos los ámbitos: social, jurídico y científico. El progreso y la civilización, aunque con características diferentes, expresan  la plenitud del hombre en toda su originalidad y singularidad, solo a partir de la valorización de sus potencialidades. Vías de humanización y de auténtico progreso son en grado de limitar y eliminar cada forma de mortificación de la realidad existencial, de la vida a la salud de cada hombre y de cada mujer, y en cambio favorecer el máximo bienestar de los individuos y de las sociedades en el futuro.

            La Bioética Existencial nace como intuición e investigación que involucra investigadores, formadores o simples ciudadanos, creyentes o no, que adviertan  la necesidad de responder a las preguntas sobre el sentido, las decisiones científicas y la práctica ética en diferentes contextos, dando auténtica dignidad al concepto de hombre, en su dinámica de relación extrínseca, en las circunstancias específicas y en la realidad de la vida cotidiana, en ayuda a la convivencia civil, al respeto de cada individuo en toda "situación de la vida." A tal fin nuestra reflexión propondrá a aquellos que se reconozcan o querrán con dividir los supuestos y las líneas esenciales de una renovación de la  Bioética: interdisciplinariedad, comparación y bases metodológicas que podrían aclarar aspectos y dificultades. 

De este modo, la Bioética Existencial como ética de la vida podrá formar parte de las elecciones cotidianas mayormente humanas.

  • Repensar la Bioética a partir de las exigencias de  comprensión e inculturación de las condiciones previas y promover el diálogo.
  • Reconocer las razones de una base epistemológica para considerar la finalidad humana1 de cada decisión y acción propias del Hombre. Partiendo de aquello que el Hombre ha elaborado en siglos y milenios,alcanzando el mayormente humano en cualquier dominio: encontrar y compartir, implementar y elegir el  “bien mayor” .
  • Una ética de la vida y de la existencia para el hoy y para el futuro, basada en criterios de respeto y reconocimiento del ser-humano-personal, no necesariamente inspirada a principios religiosos. Una Bio-ética para detectar el sentido de la vida y la preservación de sí mismo que pertenecen a cada ser viviente, según modalidades específicas del Hombre, investigando y descubriendo  nuevas formas de humanización.
  • La reflexión sobre la aceleración de la actividad científica y la experimentación ilimitada, la identificación de ‘humanismos’ utilitarios, instrumentales y la necesidad de recuperar los fundamentos antropológicos y filosóficos en apoyo a la misma investigación, tiene como objetivo devolver a cada Hombre un progreso beneficioso y no destructivo.
  • El incuestionable supuesto que el Hombre no puede ser objeto y conejillo de indias a toda costa: denunciar e impedir el fracaso de los derechos humanos de cara a las exigencias contradictorias de una ciencia subordinada a los intereses económicos, a causa de las injusticias sociales y  mundiales.  Tal libertad "absoluta", sin reglas ni  reflexión sobre las posibles consecuencias, dicta, desde hace tiempo, condiciones de supervivencia generando ulteriores discriminaciones o, provocando males incontrolables y  catástrofes naturales imprevisibles.
  • Innovar y sostener una "Ciencia para el Hombre", según opciones que rechacen metodologías de regímenes aberrantes, sostenidos por intereses partidarios  y de tácito consenso a nuevos poderes absolutos, "clones" de trágicas experiencias del pasado.
  • Un progreso realista, pensado y deseado de acuerdo con el criterio de "Bien mayor" y no de "mal menor", que surjan de la conciencia, de la responsabilidad y  de la "formación"  a la libertad de ser y pensar. Avance que no está sujeto a las ideologías preconstituidas y que salvaguarde la exigencia peculiar de respeto del Hombre para apoyar cada una de su conquista.
  • Vida humana entendida como premisa de la libertad,  en el respeto de la naturaleza, ‘hábitat esencial’,  siguiendo criterios "ecológicos", no determinados por leyes manipuladas o por  intereses  colectivos  a  expensas  de la dignidad del individuo,  del  cuidado y de los medios indispensables para su existencia y sustento.
  • Decisiones y elecciones de valores que, en la confrontación y en el diálogo, puedan buscar soluciones a los problemas existenciales y ofrezcan la posibilidad de entrega trans-generacional.

El valor del patrimonio recibido podrá ser trasmitido a las nuevas generaciones, libre de prejuicios y de revisionismos, evitando errores y  autodestrucción, mediante la contribución de los académicos y el aporte humano de quienes preceden históricamente.

  • Solicitud y supervisión por parte de aquellos que se reconocen en la Bioética Existencial para que en las políticas sociales y en las tareas representativas se opere de acuerdo a la conciencia, al conocimiento, a la ética, a la claridad y a la transparencia, en el decir y en el hacer, absteniéndose de la mistificación y que todos puedan comprender, participar, disentir o concordar, disponiendo, para la intervención, de instrumentos  semánticos y culturales.
  • Religiones y Bioética Existencial: los valores religiosos serán acogidos y serán parte integrante de la confrontación, de acuerdo con el criterio del  "más humano – più umano", como garantía del ser humano, de relaciones humanas "justas", de la plena igualdad y del recíproco respeto entre hombres y mujeres y entre Pueblos.
  • Bibliografía y notas

Tal fin no podrá jamás sacrificar al hombre o rendirlo - bajo ninguna circunstancia – medio o instrumento para alcanzar un objetivo aunque este sea elevado. Considerar el fin humano... ponderar si tal finalidad agrega humanidad y plenitud de vida a ese hombre en su singularidad,  en el respeto de  cualquier otra vida humana y en el derecho ‘a ser’ de los otros. (It.: Tale fine non potrà mai sacrificare l’uomo o renderlo — in nessun caso — mezzo o strumento per giungere a uno scopo sia pure elevato. Considerare il fine umano: ponderare se tale finalità aggiunge umanità e pienezza di vita a quel singolo uomo, nel rispetto di ogni altra vita umana e del diritto a essere di altri).

2  Entendemos por “bien mayor” la plenitud del ser y de la vida del hombre, la explotación de un bien existencial que no mortifique de algún modo su vida y su dignidad según los supuestos ya expresados. El “bien mayor” no se refiere a la individualidad sino a la generalidad de la condición humana y de la persona, en referencia del valor más alto filosófico, religioso etc. (It.: Intendiamo per “bene maggiore” la pienezza d’essere e di vita dell’uomo, la fruizione di un bene esistenziale che non mortifichi in alcun modo la sua vita e la sua dignità, secondo i presupposti già espressi. Il “bene maggiore” non si riferisce al singolo, ma alla generalità della condizione umana e della persona, considerando il valore più alto di riferimento umano, religioso o filosofico).

  • (Pontificio Ateneo Sant’Anselmo y Aracne editrice - Roma)
  • (Traducción española en colaboración con la doctora Beatriz  D’Ambrosio)

 

Usted puede profundizar  este tema  en el  siguiente link:

http://www.aracneeditrice.it/aracneweb/index.php/pubblicazione.html?item=9788854889491

¿Cómo citar esta voz?

Sugerimos el siguiente modo de citar, que contiene los datos editoriales necesarios para la atribución de la obra a sus autores y su consulta, tal y como se encontraba en la red en el momento en que fue consultada:

Sinopoli, Concetta F. BIOÉTICA EXISTENCIALLópez Barahona, Mónica, CÉLULAS TRONCALES, en García, José Juan (director): Enciclopedia de Bioética.
Última modificación: Monday, 6 de July de 2020, 12:55